Geografía. Bachillerato/oposición Geografía e Historia. Práctica: Mapa movimientos migratorios de España 1950-1973
Mapa de migraciones interiores principales (Comentario)
Estamos ante
un mapa temático cualitativo, analítico y de flujos. Representa las direcciones
e intensidad de las corrientes migratorias internas (principales) de 1960-1973,
periodo en el que tiene lugar el máximo de desplazamientos que han modificado
la distribución de la población española. Se trata de un «mapa de flujos» donde
se usan líneas de diverso grosor para representar movimientos
(lugares de salida-origen y de llegada-destino). Éstas suelen representar un
grosor proporcional al volumen del movimiento.
ANÁLISIS:
a)
Dirección de los desplazamientos (lugares de origen y de destino)
Según se
muestra en el mapa, un análisis general de las direcciones de estos
desplazamientos, demuestra que los emigrantes tienen una preferencia determinada
al elegir el lugar de destino. Así, los emigrantes que van a Barcelona son
oriundos, mayoritariamente, de Andalucía y Extremadura; los que van a Madrid,
castellanos y extremeños; los del País Vasco, de Castilla y León; y los
manchegos y murcianos prefieren la Comunidad Valenciana. Las provincias de
Barcelona y Madrid han recogido más del 50% de la emigración española. De un
modo general podemos determinar que:
§ Las Comunidades de salida de emigrantes
son aquella que tienen un crecimiento natural positivo y con predominio del
Sector Primario (Agricultura), se tratan de zonas del interior peninsular.
§ Las Comunidades receptivas son las que
en este periodo principalmente, experimentan un importante desarrollo económico
(Industria o Sector Servicios) y que excepto Madrid, se localizan en la
periferia.
§ Las Comunidades con mayor pérdida de
población ( por desplazamientos) son Andalucía y Extremadura. Las Comunidades
del principal destino de esta población han sido Madrid y Cataluña.
b) Evolución
histórica (causas y consecuencias)
Exceptuando
la provincia de Madrid el mapa refleja que el trasvase de población en la península
ha tenido lugar desde el interior hacia la periferia.
Estos desplazamientos, que ya se iniciaron levemente en siglos
anteriores – desarrollo de las zonas costeras y de Madrid por su calidad de
capital-, alcanzan en los últimos años del s. XIX y en la segunda
mitad del XX su máximo desarrollo. Este fenómeno va unido principalmente a
procesos de desarrollo económico, industrialización, que en España tienen lugar
principalmente durante el s. XX.
Las
principales etapas de estas corrientes migratorias durante el último siglo son:
1º Finales
del s. XIX hasta 1960.
Se inicia de
un modo significativo un éxodo rural,
trasvase de la población activa agraria excedentaria, a las ciudades que
inician su industrialización: País Vasco, Barcelona y Madrid.
Las causas de
estos desplazamientos son:
§ Excedente de población agraria por los
inicios de mecanización en el campo y la crisis de la filoxera que afecta a
amplias regiones vinícolas.
§ Dificultad de emigraciones exteriores
por el desarrollo de la 1ª Guerra Mundial
§ Desarrollo económico, inicios de la
industrialización e importantes obras de equipamiento e infraestructuras que
tienen lugar durante la Dictadura de Primo de Rivera.
§ Desarrollo del ferrocarril que facilita
los desplazamientos
Esta intensa
corriente migratoria se reduce durante la Guerra Civil y la posguerra
2º De
1960 a 1975.-Intensificación de los movimientos migratorios internos
como consecuencia de:
— Aumento de la población
—
Desarrollo económico – (Plan
de Estabilización)
Las
provincias de origen de los emigrantes son la que tienen un crecimiento de
población mayor y con una economía donde predomina el sector
primario: Extremadura, Andalucía, Submeseta Sur y, en menor medida, la
Submeseta Norte. Las zonas de destino serán las capitales de las
tradicionales zonas de desarrollo industrial como Madrid, Barcelona y País
Vasco a las que se une Valencia. Según las estadísticas, 1964 es el año
que representa un mayor número de desplazamientos dentro de la Península.
Por otra
parte el auge del turismo produce también importantes desplazamientos a las
zonas costeras del litoral mediterráneo y Baleares aunque no estén
representados en el mapa
3º
Desde 1975 hasta 1985.-
Las
emigraciones se reducen a partir de la crisis energética de
1973 que afecta a las zonas industrializadas y a los procesos de reconversión
que se llevan a cabo durante la década de los 80 y que afectará principalmente
a los sectores siderúrgico, metalúrgico y naval. Esta nueva situación económica
dará lugar no sólo a la disminución de
las corrientes migratorias sino también a un cambio en
las características del emigrante.
—
Disminución de la intensidad del éxodo rural
—
Inicio del retorno, en parte, de emigrantes a sus lugares de origen
— Aumento de
las migraciones interurbanas dentro de la misma provincia o Comunidad.
—
Diversificación de los lugares de destino hacia otras comunidades que aceleran
su desarrollo
Como
consecuencia las comunidades que tradicionalmente habían sido receptoras de
emigrantes presentan durante esta década un saldo negativo mientras que
Andalucía, Canarias, la Comunidad Valenciana y Murcia se convierten en
provincias con saldo positivo.
En cuanto a
las características de los emigrantes, si entre 1950-1970 predominaban los
solteros, excedentes del sector primario que pasan a trabajar en el sector
secundario, posteriormente predominarán los casados dedicados a
actividades del sector servicios. También se desarrollan movimientos
migratorios de carácter interprovincial siendo Madrid y Barcelona las principales
áreas de influencia.
4º
Desde 1986 a 1993.-
Disminución
muy significativa de los movimientos migratorios entre diferentes Comunidades
Autónomas. Desarrollo de las migraciones provinciales, aunque no desaparecen
las interprovinciales. También tienen lugar desplazamientos entre diferentes comunidades
o provincias limítrofes como ejemplo desde Toledo, Segovia o Guadalajara hacia
Madrid. Se trata de personas con categorías profesionales cualificadas
entre áreas económicamente avanzadas y en los desplazamientos de jubilados y prejubilados
que retornan a sus lugares de origen.
Actualmente se
ha dado un desarrollo de las migraciones pendulares de núcleos suburbanos al
centro ciudad, afectando a todo tipo de población y de trabajos.
CONCLUSIONES.
Los
desplazamientos migratorios han sido de tal magnitud en España que
aproximadamente el 45% de los españoles han cambiado de municipio.
La principal
consecuencia ha sido un desequilibrio demográfico evidente
en la distribución de la población española. Pero a este desequilibrio también
se unen otros aspectos como:
–– Consecuencias demográficas. - En las
Comunidades de salida: éxodo rural – envejecimiento de la población campesina –
importante tasa de masculinidad sobre todo en zonas ganaderas y de montaña –
aumento de la mortalidad – descenso de la natalidad frente a las zonas de
destino que presentan características contrarias
— Consecuencias sociológicas. - Sensación de
desarraigo y problemas de adaptación de los emigrantes, aunque a tratarse de
población española estas consecuencias son menores
— Consecuencias económicas. – En
los lugares de origen la salida de población activa produce un descenso de la
producción, del rendimiento del trabajo, descapitalización en las Comunidades
de salida y por lo tanto una ralentización del desarrollo económico propio. Por
otra parte, en las ciudades de llegada la falta de vivienda, de puestos
escolares… .se presentan como problemas importantes.
— Consecuencias ecológicas. - Muchas zonas rurales son
abandonadas lo que puede producir cambios en algunos ecosistemas naturales
mientras que las ciudades, por el aumento de la densidad de población se sufre
un deterioro y degradación del medio: contaminación de todo tipo, problemas con
la ubicación de vertederos…
No hay comentarios:
Publicar un comentario