En el siglo II d.C ya se veian detalles de publicidad
en los objetos.
La
publicidad nos emite mensajes que esperan un feedback positivo hacia ellos y
nos promueven a acceder al producto, siempre y cuando nuestras barreras
económicas o gustos nos los permitan. En Roma alguien ya pensó asi.
Y es
que en el siglo II d.C un comerciante llamado Asenio ya serigrafiaba un
mensaje en sus productos que ponía "Emite lucernas colatas ab
asse(ne)", que queria decir: "Compra lucernas labradas por
Asenio. Ese mensaje se podia leer en el borde de una lámpara descubierta en
Cádiz. Tal uso de publicidad, prácticamente pionero, ha convertido a Asenio sin
seguramente sospecharlo en una figura a investigar.
De Asenio se
cree que trabajaba en Cesarea (hoy Cherchell), capital de la provincia
Mauritania Caesarensis, actualmente Argelia. Sus productos manufacturados se
comercializaban a todos los rincones del imperio romano, ya que se han
encontrado productos de él en Roma, Lausana y Lyon.
¿Qué son las lucernas?
Las lucernas o antiguas lámparas romanas eran pequeños
utensilios, hechos en piedra o de terracota, usados desde la prehistoria aunque
fueron los antiguos romanos quienes explotaron su producción masiva y su uso
generalizado para tener luz artificial. Eran alimentadas con aceite de oliva y
tenían desde una a una docena de mecha. Algunas tenían asas, por lo que podían
ser llevadas de una habitación a otra, y también podían ser llevadas por
actores en las obras o por los participantes en actividades rituales.
Las lucernas contenían formas de escenas eróticas, gladiadores, motivos mitológicos
o patrones florales. Estas lámparas se hicieron muy populares, ya que se podían
coleccionar y eran relativamente baratas. Estas lucernas fueron fabricadas en
masa en grandes cantidades, usando moldes en vez de técnicas artesanales. Como
resultado de esta manufactura rápida y barata, varios miles de ejemplos pueden
admirarse en museos de todo el mundo.
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Lucerna de Lorca |
Las lucernas son un registro material muy recurrente en las excavaciones
arqueológicas debido a su abundancia en los yacimientos (sobre todo de época
romana y medieval) y a la gran información que aportan al estudio arqueológico.
Al depósito de combustible se le denomina Infundibulum. Discus
a la cubierta del mismo, que solía tener forma cóncava para permitir un mejor
llenado del aceite y estaba generalmente decorado. Rostrum era la
extensión del Infundibulum hacia adelante para colocar la mecha o Ellychnium.
Al otro lado se encontraba el asa para su transporte o Ansa.
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